El Gobierno pretende cambiar la Ley del IRPF para evitar que las rentas más bajas, aquellas inferiores a los 19.747 € al año, tengan que pagar en la declaración de la Renta de 2024 (la que se pre sentará en la primavera de 2025) lo retenido de menos durante este ejercicio.
Con la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) de 15.000 € a 15.876 €, se aprobaron también dos medidas que afectaban a las personas con menor nivel de renta; por una parte, se incrementó a estos 15.876 € el umbral a partir del cual se debe presentar la Renta (es decir, quienes ganen el salario mínimo o menos no tienen que hacer la Renta 2024) y, por otro lado, y para evitar errores de salto, se rebajó la retención por trabajo (es decir, el IRPF que se retiene en la nómina) a los salarios por debajo de 19.747 €. En consecuencia, desde febrero de 2024, los contribuyen tes afectados pagan menos IRPF. Sin embargo, si no se cambia también la Ley del IRPF para consolidar la modificación, algo que solo se puede hacer a través de otra ley y no por Real-Decreto, los contribuyentes a los que se les ha retenido de menos por sus rendimientos de trabajo durante 2024, tendrán que devolverlo en la declaración de la Renta de este año, que se presentará en 2025.
Por ello, el Gobierno ha presentado en el Congreso de los Diputados en agosto un Proyecto de Ley para, entre otras medidas, sacar adelante este cambio. El objetivo es aprobar esta ley antes de que finalice el año para que tenga efectos sobre la Renta de 2024, que se presentará en 2025, y, por ello, promueve la tramitación de urgencia, que exime la presentación y obtención de determinados informes y recorta a la mitad los tiempos para alcanzar la aprobación de la norma.